Carta despedida

 Queridas familias:

                              Hoy me comunico para compartir la que será la última novedad de mi carrera docente: el trámite de mi jubilación está resuelto y el lunes 1° de agosto, con la vuelta a clase, será mi último día al frente del Delle.
Treinta y siete años de profesión y ocho junto a ustedes hacen que estos días sean bastante contradictorios para mi, se mezclan emociones encontradas: alegría, por qué negarlo, de saber que llega una etapa de descanso, sin horarios ni presiones y con la posibilidad de concretar sueños postergados y, por otro lado, la tristeza de dejar un lugar que, después de tantos años, lo siento propio: "mis chicos"..."mis" maestros..."mis" familias... Y sí, es así, todos juntos formamos una gran comunidad en la que hay un fuerte sentido de pertenencia y a la que cuesta dejar.
Quiero agradecerles el acompañamiento de estos años, los elogios se sintieron como caricias y las críticas me ayudaron a reflexionar sobre mi propia práctica y a "recalcular" cuando fue necesario.
¿Si se podrían haber hecho más y mejores cosas en estos ocho años? Sí, sin ninguna duda pero, de lo que tampoco hay dudas, es de que todas las decisiones fueron tomadas pensando en qué era lo mejor para los chicos, para todos ellos y no solo para algunos; somos una Escuela Pública.
No puedo dejar pasar este día sin agradecerles también la confianza con la que dejaron a sus hijos en la escuela, por "prestármelos" ocho horas cada día, por permitirme compartir con ellos tantas cosas, cada tropiezo y cada logro...Acompañar a los chicos en su crecimiento es un desafío diario. Sus hijos llenaron mis días de amor y, aún sin saberlo ellos, de mucha energía cuando más lo necesité. 
Hasta el próximo Acto Público cuando sea designado un nuevo Director, la escuela queda en las mejores manos que podría haber quedado, Vero y César. Juntos formamos un gran y sólido equipo, compartimos la mirada sobre la escuela y priorizando siempre a los chicos por sobre todo lo demás.
Las instituciones trascienden a las personas y es por eso que el Delle siempre va a ser el Delle; cada Director obviamente le dará su impronta a la gestión, pero estos maestros y estas familias son grandes defensores de la Escuela Pública, inclusiva y de calidad, y descuento que van a acompañar a quien llegue con el compromiso de siempre y seguramente, quien me suceda, se va a enamorar del Delle como lo hice yo.
Los quiero mucho, siempre van a estar en mi corazón.

Hasta siempre.....

                                      Claudia

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